Pasión, injusticia y reflexión

Volvía el Atlético a la Champions. Los aledaños del Vicente Calderón, abarrotados. Los afortunados que tenemos trabajo y moto, llegábamos tarde y, siguiendo instrucciones de la Policía Municipal, nos dirigíamos a una calle habilitada para aparcar; llegados allí, otro agente nos indicó que la calle estaba llena e intentáramos aparcar en otro lado. Buscamos calles con aceras anchas, dejamos nuestras motos, y al fútbol. Ganó el Atlético de Madrid. ¡Hala! A casa a seguir soñando. Al llegar a las motos teníamos todos una multa sancionada con 200 euros. Me dirigí al agente más cercano (20 metros) para preguntar por tal injusticia, contestándome que existe una señal de prohibido aparcar.

¿No se podían haber situado los agentes 25 metros antes para advertir sobre el aparcamiento de motos lleno y la prohibición de la acera de la calle de enfrente? Perdón, me olvidaba de la crisis y su eslogan: por tu seguridad hay que recaudar. Ahora casi me alegro de que Madrid no albergue unos Juegos Olímpicos, sinceramente creo que no está preparada, la prueba está en que no supo preparar un partido de Champions League. Eso sí, hay que recaudar para pagar las candidaturas olímpicas pasadas.—

Julio Rojo Atienza.

reclamatuseguro.es